CASO PRESTIGE;
Mangouras contra todos...Pladesemapesga ya lo advirtió con antelación
Sr Fiscal..., del
Estado, no es discutible en ningún estado de derecho, que Mangouras, seis días
antes del hundimiento fuese detenido, (medios extranjeros dice, secuestrado) y
esposado, encerrado en la cárcel de Teixeiro, por lo que no hundió el
petrolero.., el buque Prestige estuvo a la deriva bajo el juego del gato y el
ratón en manos de López Sors. Más fácil se lo ponemos....
Si a Usted Sr
Fiscal le roban el coche particular, lo denuncia en comisaría y 6 días después
los ladrones atropellan peatones, Usted no se consideraría el culpable, ¿ Oh sí
?..Entonces por que se empeña y tiene tanto ahínco en culpar a Mangouras de lo
que no hizo....Si seguimos por estos rumbos los responsables políticos del
Gobierno de España (PP) tendrían que estar todos presos, por que Mariano Rajoy
dejó, permitió que una buena parte de miembros del PP (su barco) hicieran todo
tipo de tropelías con los bienes del Estado, Blesa, Rato, Bárcenas...¿ Por que
no pide Usted Sr Fiscal varios años de cárcel para Mariano Rajoy por tener un
partido presuntamente podrido y lleno de corrupción...Si todos somos iguales
ante la Constitución, el Sr Mangouras, también debería tener el mismo derecho.?
Pladesemapesga
publicaba sin que nadie lo desmintiera.., el Viernes, 16 Noviembre, 2012 -
10:37 en su página Web www.pladesemapesga.com
Mangouras
"contra todos"
El buque Prestige
reunía perfectamente las condiciones de calados para entrar en el Puerto de La
Coruña, por lo que, o el responsable obtuvo una información falsa, o ya tenía
bajo ordenes superiores y premeditado negar la entrada del buque en el Puerto
Herculino, denuncia Pladesemapesga.
" Mangouras
admitió durante el interrogatorio que el calado del Prestige tras la maniobra
de adrizamiento era de 16 metros y la abogada del Estado le informó de que el
límite en el puerto de A Coruña era 14,5, según una norma militar de 1977.
"
Antón Salgado
Clavo, Portavoz del Grupo de Expertos no Gubernamentales en Salvamento Marítimo
y Vicepresidente de la Plataforma en defensa del Sector Marítimo Pesquero de
Galicia, hace un pormenorizado resumen de los acontecimientos tratados en el
Juicio del Prestige este día 15 de Noviembre de 2012 y comienza informando que,
Ángel del Real, capitán marítimo de A Coruña posteriormente ascendido a jefe de
la Autoridad Portuaria de El Ferrol, dijo ante el juez de Corcubión que ordenó
por escrito el alejamiento del Prestige hasta 120 millas de la costa «porque el
barco estaba sobrecargado, el capitán había adrizado (nivelado) llenando los
tanques de babor y, en consecuencia, hundiendo el buque hasta alcanzar los 21
metros de calado».
Sin embargo, a las
17.00 horas del 14 de noviembre, algunas horas antes de la orden de
alejamiento, el barco de salvamento Alonso de Chaves informó al centro
coordinador que el calado (la parte que navega debajo de la superficie del
agua) era de 47 pies, es decir, 15,42 metros.
El puerto de A
Coruña tiene una profundidad de 21 metros, e incluso su canal oeste llega a los
23,5.
O sea, o Del Real
obtuvo una información falsa o ni siquiera la estimó porque en ningún momento
quiso acercar el buque al puerto de A Coruña
La verdad que se
oculta diez años después, y que se demuestra como que de forma
"políticamente interesada agravando el riesgo para el litoral
gallego" los gestores incapacitados a nuestro juicio, hicieron todo lo
contrario a lo recomendado en las normativas y experiencias técnicas al efecto
ya demostradas en ejercicios anteriores.
Antón Salgado
Clavo, Vicepresidente de Pladesemapesga y portavoz del Grupo de Expertos en
salvamento Marítimo, actuó de forma inmediata a requerimiento del diario el
Mundo y del Periodista Gustavo Deus Catalán, facilitando el Plan de
Contingencias y las conclusiones del Ejercicio La Coruña 201.
Las conclusiones
del Ejercicio de La Coruña 2001 definitivas para el esclarecimiento de la
Catástrofe del Prestige
El periodista
Gustavo Deus Catalán, contó con la colaboración de Pladesemapesga, en reunión
desarrollada en la Cafetería Manhatan de La Coruña, a los pocos días de la
catástrofe, informando sobre los acontecimientos de la primera mano.
Pladesemapesga,
facilitó a este periodista y a Green Peace, ejemplares del Plan Nacional de
Contingencias y del Ejercicio La Coruña 2001.
La verdad que se
oculta diez años después, y que se demuestra como que de forma
"políticamente interesada agravando el riesgo para el litoral
gallego" hicieron todo lo contrario a lo recomendado en las normativas y
experiencias técnicas al efecto ya demostradas.
Un documento
confidencial confirma que durante las primeras 24 horas no embarcó en el
petrolero ni un experto en estructuras navales / El inspector enviado tenía la
orden de arrancar para alejarlo
El Gobierno alejó
el 'Prestige' sin seguir las instrucciones de su propio informe sobre
accidentes
El Gobierno decidió
alejar el Prestige de la costa el pasado 14 de noviembre sin seguir las
instrucciones del informe oficial de la mesa de expertos que había participado
en un simulacro de accidente el año anterior. Las autoridades dieron la orden
de llevar el barco mar adentro 120 millas sin haber enviado un «técnico
cualificado» para examinar la estructura del buque, tenían información de que
el calado era suficiente para entrar en A Coruña y sabían que del Prestige
salía sólo un «ligero hilo de contaminación», sin constancia de que presentara
grietas.
Los que tomaron la
decisión fueron el director general de la Sociedad de Salvamento Marítimo,
Javier Gárate; el subdirector general de Tráfico y Seguridad Marítima, Manuel
Nogueira; el capitán marítimo de A Coruña, Ángel del Real; el delegado del
Gobierno en Galicia, Arsenio Fernández de Mesa, y el director general de la
Marina Mercante, José Luis López Sors. Después de tomar esa opción, el grupo
informó al ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, quien avaló el
alejamiento del Prestige.
El simulacro
El 18 y 19 de
septiembre de 2001, 30 empresas y organismos e instituciones oficiales -desde
la Delegación del Gobierno en A Coruña o la Xunta hasta varios ayuntamientos,
la Guardia Civil o la Armada- participaron en lo que se llamó Ejercicio de
Salvamento y Lucha Contra la Contaminación Coruña 2001. Se trataba de un
simulacro de accidente entre un carguero y un petrolero, 60 millas al norte de
la Torre de Hércules.
En su informe
final, la Mesa del Buque Siniestrado, compuesta por un ingeniero naval y un
inspector de seguridad de la Capitanía Marítima de A Coruña, un jefe de área de
Cooperación Marítima y el jefe de un centro de salvamento catalán, hace cuatro
recomendaciones de carácter cronológico para minimizar el accidente.
En primer lugar
habla del salvamento de las vidas humanas. El segundo paso es una evaluación de
los daños. Aquí se pide información al capitán sobre el alcance de la avería y
se ordena «confirmar la parada del vertido».
El tercer punto es
clave y cuestiona la actuación del Gobierno en esta crisis. Textualmente
señala: «Se requerirá la presencia en el buque de técnicos cualificados para
evaluar la situación estructural y del equipo de gas inerte».
Y el cuarto
apartado indica que «sobre la base del informe elaborado por los técnicos en el
punto anterior» se actuará de acuerdo a dos supuestos distintos: «Caso de
informe negativo: bajo ningún concepto se le permitirá la entrada ni a puerto
ni a zona de fondeo (...) y, en todo caso, se le mantendrá siempre alejado de
la costa. Caso de informe positivo: se considerará la posibilidad de dirigirlo
a un lugar de fondeo adecuado a efectos de trasvase o trasiego de carga».
Según un documento
confidencial al que ha tenido acceso EL MUNDO, en ningún momento de las más de
24 horas que pasaron desde el May Day enviado a las 14.15 horas del 13 de
noviembre, hasta que el comité de crisis ordenó alejar el barco de la costa,
embarcó en el Prestige experto alguno en estructuras navales.
En ese periodo
estuvieron a bordo del Prestige tres técnicos de la empresa de salvamento
Tecnosub y un inspector de la Capitanía Marítima de A Coruña, Serafín Díaz, que
en ningún caso informaron al Centro de Coordinación sobre la situación
estructural del buque.
En concreto, los
trabajadores de Tecnosub pasaron en el petrolero 10 horas (desde las 8.15 hasta
las 18.15 horas) y el funcionario coruñés, ocho (de las 9.50 a las 18.15).
José Luis Velasco,
presidente de Tecnosub, ha confirmado a este periódico que dos equipos de su
empresa estuvieron a bordo del Prestige. El primero, de tres personas, entró y
salió el 14 de noviembre, el día que se ordenó alejar el petrolero. El segundo,
compuesto por nueve expertos (incluidos los holandeses de Smit Tak), llegó al
barco en la madrugada del día 15, cuando la decisión ya estaba tomada y el
petrolero estaba a 60 millas.
Velasco aseguró que
su primer grupo de técnicos fue al Prestige «bajo contrato de salvamento». «Fueron
a amarrar el barco al remolcador y a hacer labores de asistencia. Vieron
grietas en el barco, pero no estaban allí para valorar la estructura interna,
ni tenían capacitación para ello. Para eso tiene técnicos la Administración».
Sin embargo, el
inspector enviado por las autoridades tampoco tenía cualificación oficial para
evaluar los daños del buque y sólo llevaba encima una orden: arrancar el motor
del petrolero. Según varios expertos marítimos consultados por EL MUNDO,
técnicos como Serafín Díaz no son ingenieros navales, ni están capacitados para
analizar el esqueleto de un petrolero. Esas fuentes aseguran que el
funcionario, «un profesional con mucha experiencia», fue enviado «sólo para
arrancar las máquinas».
Ángel del Real, capitán
marítimo de A Coruña hasta que el pasado martes fue ascendido a jefe de la
Autoridad Portuaria de El Ferrol, dijo ante el juez de Corcubión que ordenó por
escrito el alejamiento del Prestige hasta 120 millas de la costa «porque el
barco estaba sobrecargado, el capitán había adrizado (nivelado) llenando los
tanques de babor y, en consecuencia, hundiendo el buque hasta alcanzar los 21
metros de calado».
Sin embargo, a las
17.00 horas del 14 de noviembre, algunas horas antes de la orden de alejamiento,
el barco de salvamento Alonso de Chaves informó al centro coordinador que el
calado (la parte que navega debajo de la superficie del agua) era de 47 pies,
es decir, 15,42 metros. El puerto de A Coruña tiene una profundidad de 21
metros, e incluso su canal oeste llega a los 23,5. O sea, o Del Real obtuvo una
información falsa o ni siquiera la estimó porque en ningún momento quiso
acercar el buque al puerto de A Coruña.
En cuanto al
vertido, los hombres que decidieron poner mar de por medio entre A Coruña y el
Prestige nunca tuvieron la certeza de que el barco se estaba desangrando a
borbotones. Más bien lo contrario. A las 15.27 horas del 14 de noviembre, el
remolcador Ría de Vigo informó de que no se apreciaba pérdida de fuel oil. Dos
horas después, el Alonso de Chaves habló de «ligero hilo de contaminación». Esa
noche, el Prestige recibió la orden de perderse en el mar, lejos del abrigo de
un puerto y de una decisión políticamente peliaguda.
Referencias:
GUSTAVO CATALAN DEUS. RAFAEL JOSE ALVAREZ
Antón Salgado
Clavo, Portavoz del Grupo de Expertos y Vicepresidente de Pladesemapesga, desde
la misma Sala de Prensa del Tribunal donde se celebra el Juicio del Prestige
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