Problemas “raíz” de la educación
por Angel Fidalgo
|
Si queremos exterminar la
mala hierba, no nos queda más remedio que cortarla de raíz. Si cortamos una
rama, e incluso el tallo, el problema seguirá latente y no tardará mucho en
crecer, de nuevo, la mala hierba.
Lo mismo ocurre en la
educación, donde hay una serie de problemas raíz y cada raíz da origen a otros
problemas (tallos y ramas).
Pero ¿cómo identificamos
esos problemas raíz? Con las siguientes indicaciones:
1. Están presentes en todos los niveles y ámbitos
educativos.
2. Son la materia prima de los problemas
educativos. Causan otros problemas.
3. El origen del problema suele ser el modelo
educativo o bien el propio profesorado. No suele ser un problema achacable
directamente al alumnado.
Vamos a poner un sencillo
ejemplo, con el problema de la
“desmotivación” del alumnado. Este problema es común a
cualquier nivel educativo, por tanto cumple el paso 1. Para saber si es materia
prima debemos comprobar si algún otro problema puede causarlo. En este caso la
desmotivación puede deberse a múltiples causas, por ejemplo la falta de
conocimientos previos (si un alumno no entiende lo que dice el profesor
se desmotivará muy rápidamente). Por
tanto, la desmotivación es un problema habitual pero no es raíz.
Otro problema común es la “actitud pasiva” de nuestro alumnado.
En muchas ocasiones y, sobre todo, durante las lecciones magistrales, están
como estatuas. Aunque sabemos que mentalmente están vivos porque algunos toman
apuntes. Se cumple el paso 1 ya que es un problema general. Además cumple el
paso 2 ya que la
actitud pasiva del alumnado suele crear otros problemas como es la
desmotivación, principalmente, en sesiones teóricas. Además, el
problema no suele ser del alumnado, se debe al modelo educativo (a veces
excesivamente centrado en el docente) y al profesorado que no suele aplicar
metodologías activas para crear el hábito activo. Así pues, la actitud pasiva del alumnado es un
problema raíz.
¿Cómo solucionar los
problemas raíz?
Pues para este caso,
o bien esperamos a que el modelo educativo cambie, consiguiendo que nuestro
alumnado tenga hábitos activos en el aula (dicho de otra forma, que los cambios
en el modelo educativo no se queden en el “papel”), o bien aplicamos un método
activo para que el alumnado adquiera el hábito activo basándonos en una
experiencia de innovación educativa.
Desde hace varios años
algunos grupos, de investigación e innovación de varias universidades, estamos
trabajando para aportar un método
para aplicar la innovación educativa en la resolución de problemas raíz.
Este método se denomina
MAIN (Method for Applying Innovation in educatioN). En
posteriores “post” iré informando de dicho método.
|