|
Ley de montes, ¿un paso atrás en la
protección forestal?.
|
La nueva ley de montes nos traslada a la situación anterior,
abriendo de nuevo la posibilidad a la recalificación de terrenos afectados por
un incendio reciente. Con la modificación anterior que entró en vigor en 2006
se añadió una cláusula que impedía esta recalificación en un plazo mínimo de
treinta años. Eso impedía que alguien provocara un incendio para conseguir una
recalificación que no había podido conseguir de otro modo debido a la oposición
ecologista.
Durante décadas he estado oyendo eso de «han quemado el bosque
para hacer una urbanización», o «para instalar un tendido eléctrico»; es algo
que creo haber conocido toda la vida y lo tengo grabado en el subconsciente
como una verdad indiscutible; visto en retrospectiva, supongo que unas veces
sería cierto y otras una mera suposición o leyenda urbana. El caso es que el
año 2006, con aparente buen criterio, se cambio la norma y se incluyó lo de los
treinta años. Parecía una buena medida porque desincentivaba eso de provocar un
incendio para conseguir la recalificación; esperar treinta años parece
demasiado para un humano normal.
¿Por qué entonces cambian otra vez la ley de montes para
retrotraernos a la situación anterior al 2006?
Según dicen, aunque aparentemente la normativa del 2006 protegía
los bosques más que su antecesora, en algunos casos podía ocurrir precisamente
lo contrario. Ejemplos: alguien está en riesgo de que le expropien unos
terrenos y provoca el incendio para que no puedan ser recalificados y, por lo
tanto, evitar la expropiación. O quien le incendia el terreno al vecino para
que no pueda edificar. ¿Excusas muy rebuscadas? Me lo parecen, pero carezco de
estadísticas fiables para poder rebatirlas.
¿Hasta qué punto la ley de 2006 pudo evitar incendios?
¿En qué afectará el nuevo cambio de la ley de montes? ¿Se
incrementarán los incendios para conseguir recalificaciones?
Ramón Cerdá
|