NO SE APLICA EL CRITERIO QUE LE EXIGE A ACS
Iberdrola opta por no provisionar el agujero de 250 millones de Gamesa
El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán (EFE). @Agustín Marco.-
Iberdrola ha decidido no aplicarse la medicina que le exige a ACS para curar sus inversiones fallidas. La eléctrica ha decidido no provisionar su inversión del 19,5% en Gamesa, donde acumula importantes minusvalías. El grupo dirigido por Ignacio Sánchez Galán considera que su caso es diferente al de holding de Florentino Pérez, al que ha acusado de no contabilizar de forma adecuada las pérdidas de su participación del 20,2% en el grupo energético.
Iberdrola estima que las normas de contabilidad internacional no le obligan a cubrir las minusvalías latentes de cerca de 250 millones de euros que tiene en el fabricante de aerogeneradores. Su argumento se basa en que, a diferencia de lo que le ocurre al grupo de los March y los Albertos, Iberdrola si tiene presencia en el consejo de administración y, por tanto, influencia significativa en la gestión. Al tener asiento en el órgano de gobierno, su inversión es a largo plazo y no de carácter financiero, por lo que no tiene obligación de provisionarla.
Sin embargo, Gamesa se hundió un 50,8% en 2010, hasta cambiarse a 5,7 euros, el precio más bajo en siete años. Teniendo en cuenta que Iberdrola compró su 14,1% a un precio consolidado de 12,7 euros, sus pérdidas latentes se elevaban a 260 millones de euros. A finales del pasado, aprovechando precisamente este desplome, la primera eléctrica española elevó su paquete en la empresa vasca hasta el 19,5%.
A priori, si Iberdrola aplicase los mismos principios que ha exigido a ACS por sus pérdidas en el 20,2% que tiene en la eléctrica y el 29,9% en Hochtief, cuestión por la que ha denunciado en los tribunales a la constructora, el grupo energético debería haber cubierto esta posición. Pero Iberdrola, que hoy presenta sus cuentas, ha decido no hacerlo porque se basa en la norma 28 de las IAS.
Fuentes próximas a Iberdola aseguran que su caso es muy distinto al de la constructora. La principal diferencia es que no tiene presencia en el consejo y que, en consecuencia, no tiene influencia en las decisiones de la compañía, cuestión vital según las normas internacionaleS. Pero sobre todo subrayan que ACS tiene calificada su inversión en Iberdrola como de carácter financiero y disponible para la venta (IAS 39). Por el contrario, Iberdrola ha sido un accionista estable de Gamesa, aunque en 2009 vendió un 10% del capital a 16,10 euros por acción.
ACS y Bancaja
Efectivamente, ACS no tiene asiento en el consejo de la empresa con sede en Bilbao porque los administradores rechazaron su propuesta en la pasada junta. Pero si lo tiene Bancaja, que es dueña de cerca del 5,7% del grupo energético y que, tras oponerse a hacerlo, ha tenido que destinar 650 millones de euros para cubrir sus pérdidas en esta inversión. La caja valenciana, ahora fusionada con Caja Madrid, también fue advertida por
ACS justificó que no debía dotar sus minusvalías de casi 2.000 millones en Iberdrola porque la eléctrica cotizaba por debajo de su valor en libros y por sus perspectivas de cobrar dividendos según la política de remuneración al accionista. La constructora añadió que era más adecuado valorar Ibedrola por el método de descuento de dividendos futuros “en lugar de tomar como referencia la cotización bursátil, que en ningún caso representa el valor fundamental de la compañía”.
|