RUBALCABA ACAPARA TODO EL PROTAGONISMO

La dirección del PSOE considera a Zapatero un "peso muerto" y le margina de su Conferencia

Elena Valenciano presentó ayer en rueda de prensa la Conferencia Política (EFE). José L. Lobo / Alberto Mendoza

José Luis Rodríguez Zapatero tendrá un papel marginal en la Conferencia Política del PSOE que arranca hoy en Madrid. Pese a que el presidente del Gobierno sigue siendo secretario general del partido, cargo que no abandonará hasta la próxima primavera, Alfredo Pérez Rubalcaba acaparará todo el protagonismo. "Zapatero es un peso muerto", aseguraba ayer gráficamente a El Confidencial un miembro de la dirección socialista.

El deseo de Rubalcaba de marcar distancias con Zapatero se visualizará durante este fin de semana en la Conferencia Política. El candidato a La Moncloa no podía dejar fuera del cónclave a su predecesor, pese a que lo considera una rémora para sus aspiraciones, porque todavía es el número uno del PSOE, pero le ha relegado a una función meramente testimonial para cubrir las apariencias.

Zapatero sólo tomará la palabra en el acto inaugural, a media tarde de este viernes, y lo hará después del secretario de Organización del partido, Marcelino Iglesias, y del presidente del Grupo Parlamentario de los Socialistas Europeos, Martin Schultz. A partir de ese momento, la figura del presidente del Gobierno se desvanecerá por completo -ya no volverá a intervenir en los tres días del cónclave- y emergerá la de Rubalcaba, el auténtico hombre fuerte del PSOE.

El candidato socialista no ha ocultado que aspira a relevar a Zapatero como secretario general del partido en el próximo Congreso Federal, aún no convocado pero que, previsiblemente, se celebrará en febrero o marzo del próximo año. Si Rubalcaba gana las elecciones del 20-N o pierde por una diferencia ajustada, apenas encontrará resistencias internas para alcanzar su objetivo. Sin embargo, una derrota humillante frente a Mariano Rajoy provocaría, muy probablemente, que surgieran otros aspirantes a disputarle el cargo.

Guiños a los 'indignados'

El objetivo oficial del PSOE es que la Conferencia Política sirva para sentar las bases del programa electoral, aunque en realidad el cónclave se enmarca en la estrategia de Rubalcaba de confrontar su proyecto con el de Mariano Rajoy. Los socialistas esperan que este fin de semana funcione como un altavoz de sus principales promesas para el 20-N, sus guiños a los indignados y su giro socialdemócrata. Todo ello con el objetivo de reforzar su mensaje electoral, según el cual Rubalcaba propone y el PP simplemente se opone.

El núcleo central de la Conferencia se desarrollará mañana sábado, cuando se celebran las cinco comisiones temáticas, en las que se discutirán las 2.332 enmiendas a la ponencia marco -el documento, muy genérico, que servirá de base a los debates- recibidas por Ferraz. Los socialistas debatirán sobre Gobernar los cambios, Una economía sana y competitiva, Lo urgente, el empleo, La igualdad en el siglo XXI y Democracia. Sin embargo, el PSOE no ha elegido a sus primeros espadas para defender su oferta electoral, sino a figuras poco conocidas por la opinión pública y de escasa proyección mediática.

En el programa apenas destacan los nombres de los ministros Ramón Jáuregui y Valeriano Gómez, frente a ponentes de bajo perfil como la cabeza de lista al Congreso por Cantabria, Puerto Gallego; el diputado por La Rioja César Luena; el alcalde de Azuqueca de Henares, Pablo Bellido, o el barón murciano Pedro Saura. Asimismo, entre jóvenes diputados como Juan Moscoso, Hugo Morán o Pedro Sánchez, también se puede encontrar a veteranos que ocupan la segunda fila del partido, como Juan Fernando López Aguilar, Enrique Barón o José María Benegas, así como a la rescatada ex ministra Cristina Narbona y al líder del PSOE en Castilla y León, Óscar López.

Además, diversos expertos de la sociedad civil participarán en tres foros dedicados a la reforma electoral, la financiación del sistema sanitario e igualdad. Rubalcaba intervendrá en estos dos últimos, donde previsiblemente llamará a proteger el Estado de Bienestar de la amenaza del PP, en un nuevo intento por recuperar el voto socialista de 2004 y 2008.

El candidato socialista se ha propuesto conectar de nuevo con el electorado femenino, tradicionalmente más próximo al PSOE pero que ahora se ha acercado también al PP. En el foro de igualdad, Rubalcaba charlará con su número dos, Elena Valenciano; la ministra de Sanidad, Leire Pajín, y la consejera de Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía, Micaela Navarro. El domingo, Rubalcaba será el encargado de la clausura, aunque en realidad constituirá la apertura de la fase más intensa de la larga precampaña electoral.