La Guardia Civil de Pontevedra detecta bandas del Este que piratean redes wifi para cometer estafas
Estos grupos se aprovechan de conexiones desprotegidas para realizar las transacciones fraudulentas
Los dos agentes del Equipo de
Investigación Tecnológica de la Guardia Civil de Pontevedra observan un programa
que contiene un mapa de localización de redes wifi. // Gustavo Santos
MARTA FONTÁN - VIGO Tener la red wifi del ordenador en abierto o con
contraseñas endebles puede acarrearnos más de un susto. Y no solo porque algún
vecino aproveche esta circunstancia para robar la señal y disfrutar en su casa
de internet gratis. Hay quien tiene peores intenciones y buena prueba de ello es
que la Guardia Civil de Pontevedra ha detectado casos de bandas del Este que
piratean redes ajenas para perpetrar estafas a través de internet. Y esta no es
la única actividad delictiva que cometen aquellos que, con el objetivo de tratar
de garantizar su propio anonimato, se cuelan en las conexiones de otras personas
para dejar allí el rastro del delito: los agentes especializados también han
investigado asuntos en los que se procedió de esta misma manera para descargar y
distribuir archivos de pornografía infantil o para abrir perfiles falsos en
redes sociales como Facebook con el fin de injuriar o acosar a otras
personas.
Los usuarios a los que les roban su señal con un fin delictivo
suelen ser desconocedores de esta circunstancia. "Los usuarios no vienen a
denunciar este tipo de situaciones porque no lo saben; los casos que hemos
tenido los descubrimos nosotros cuando, en la investigación de un delito,
detectamos que los delincuentes accedieron a esa red wifi", coinciden Gonzalo
Sotelo y José Torres, los dos agentes que componen el Equipo de Investigación
Tecnológica de la Benemérita en Pontevedra. El problema es que a quien
inicialmente se identifica en la investigación criminal es al ciudadano
propietario de la red pirateada. "Con el consiguiente susto inicial para esa
persona, aunque después se descubra que no tiene nada que ver", afirman estos
especialistas.
Quienes se amparan en wifis ajenas para delinquir utilizan
este método sobre todo para cometer estafas. Uno de los casos más graves que
hubo en la provincia fue el de una empresa pontevedresa a la que le sustrajeron
120.000 euros de una cuenta bancaria a través de internet. La investigación
permitió concluir que una banda búlgara accedió a la wifi de un usuario con
domicilio en Las Palmas e hizo la transaccion fraudulenta desde esa señal. "Esta
persona tenía la red en abierto, sin seguridad, algo que aprovechó la
organización para cometer la estafa", revelan. En otro asunto, éste relacionado
con pornografía infantil, la víctima fue un vigués que también tenía la wifi sin
proteger. "Cuando se le identificó, vimos que él no era el culpable, entre otros
motivos porque no había ningún tipo de material delictivo en su ordenador",
concluyen.
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