Capitalismo, Comunismo y... “la bombilla”

                        En uno de tantos “debates” ante el ordenador y entre seres que ni se conocen, si en mayoría de casos se sabe el nombre y por tanto tampoco el sexo; menos aún el lugar donde viven o vegetan... sólo los unen encuentros fugaces y a través de un idioma que como el Español, tiene tantos matices que a veces “ni se entienden”; pero aún así surgen temas interesantes y se transmiten ideas o puntos de vista.

                        Esta tarde mi interlocutor me habla de capitalismo, marxismo, liberalismo, neo liberalismo y otros, “berenjenales de panza y bolsillo, puesto que todos los sistemas hasta aquí en eso se han convertido”.

                        Antes ha surgido el tema de la banca pública por tanto controlada por el Estado. Pero la banca privada, que es claro que de controles no quiere saber nada... es todo lo contrario, puesto que es ella la que controla al Estado; y es por lo que (cuando lo consigue) ocurre lo que está ocurriendo hace ya mucho tiempo... hoy no quiero repetir una vez más, lo que afirmara Jefferson hace ya dos siglos o más y que resultó una terrible profecía puesto que... al final el que logra acumular dinero en cantidades “industriales”... con “el vil metal” lo compra todo y... “como todo se vende”, pues ocurre lo ya dicho y ese es el que parece eterno repetir del ser humano... “u lo que sea, puesto que la palabra humano, habrá que irla archivando y buscar una nueva”.

                        Como el tema se hace largo y hay que resumir, para tratar de aportar “algo de luz”, en los asuntos tan obscuros como son los del dinero (que es el poder: reitero) en masa y controlado por seres cuya ambición es inmedible por cuanto su avaricia es enorme, al final respondo y termino con la siguiente respuesta.

                        Lo mismo que para "encender una bombilla", se necesitan dos hilos y dos corrientes, que al coincidir producen el milagro"; creo que en muchas otras cosas sería igual. El Estado para que funcione bien, tiene que tener sus fuerzas de control y en conjunción con la iniciativa privada, se conseguiría mucho más... por eso el verdadero Estado actual, tiene que ser como el símil de la bombilla... "y saber guardar los equilibrios para que la bombilla luzca en un muy largo futuro y que nunca estalle".

                        LO IDEAL: Lo ideal sería que todo fuese estatal y que el Estado supiese distribuir a cada cual SEGUN SUS MÉRITOS O NECESIDADES; pero eso es imposible... "mientras el ser humano tenga panza, bolsillo y por ende, aparato sexual".
El Estado perfecto es el termitero u hormiguero... pero este no es un Estado, es un cuerpo vivo, con automatismos para que cada unidad móvil cumpla con la misión para la que ha nacido... en el mismo no existe ni el cerebro... al menos no se ha encontrado aún... que yo sepa. 

                        Sé que hablar de todo esto, es como... “hablarle o escribirle al viento” (que yo suelo decir y ya riéndome de mi mismo ante mi propio espejo) pero... el día suele ser muy largo y hay que emplearlo de alguna forma... y como yo no tengo problemas, ni de salud ni de dinero, por cuanto de lo primero me atengo a lo que me queda y gracias a la medicina actual (y una almorzada de comprimidos y capsulas, amén de un parche de nitroglicerina) vivo bastante bien pese a lo viejo que ya soy... y de dinero... “hace mucho tiempo que tengo mi propio banco, puesto que desde ni me acuerdo, siempre gasté bastante menos de lo que gané y el resto lo guardé precisamente para mantenerme alejado de bancos y del propio Estado”... pues al menos, tengo libertad para decir lo que me parece y lo que pienso podría ser positivo... o mucho más positivo que lo que hoy sufre una sociedad rica... pero... “miserablemente explotada por (en general) viejos como yo, que con poco “material” tenemos más que suficiente para ir viviendo bastante bien... “los inviernos que nos queden en este hermoso planeta”.

                        Pero aquí no se arreglará nada o casi nada y en muchos siglos; puesto que el hombre (y la mujer) de hoy, piensa lo mismo que pensaban hace milenios... “o sea, cómo vivir sin esfuerzo, con la máxima de las comodidades y a costa del esfuerzo de otros”... o sea que aquel gran mensaje (como muchos otros del Cristianismo) de que... “ganarás el pan con el sudor de tu frente”... cristianos y no cristianos, lo interpretaron de la siguiente forma... “ganarás el pan (y el caviar) con el sudor del de enfrente”; y todo lo demás, viene como consecuencia de esta errónea interpretación.

                        Y lo terrible, es que “el de enfrente piensa lo mismo y lo haría igual o peor si controlara la situación”; así es que paciencia y a seguirse riendo ante el espejo.

Antonio García Fuentes

(Escritor y filósofo)

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