EXMINISTRA ELUDE DEFINIR SU FUTURO EN EL PSOE
Chacón disuelve su bando mientras Rubalcaba ultima otra ‘purga’ en el Congreso
Carme Chacón (EFE). Alberto Mendoza
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Carme Chacón se ha replegado a sus cuarteles de invierno tras caer
derrotada por 22 votos ante Alfredo Pérez Rubalcaba, dejando todo el
protagonismo al nuevo secretario general del PSOE y su equipo. La exministra de
Defensa ha pasado de rozar el liderazgo de su partido a ejercer de diputada rasa
como vocal de las comisiones de Reglamento y Constitucional, así como de la
Diputación Permanente. Una tarea que le aleja del escaparate político y que
mantiene la incertidumbre sobre su futuro inmediato.
Chacón se reunió la semana pasada con diversos diputados afines, y aunque
prefirió no desvelar sus planes, trató de transmitir tranquilidad a los
suyos, diluyendo la posibilidad de constituir un frente chaconista en
el Congreso. Así, el pasado miércoles aprovechó el restablecimiento de los
plenos parlamentarios para desayunar con algunos de sus más fieles, como José
Zaragoza, exsecretario de organización del PSC; o José Andrés Torres
Mora, exjefe de Gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero.
La conversación versó, entre otras cosas, sobre el primer duelo de Rubalcaba
como secretario general frente a Mariano Rajoy, pero también sobre el
temor extendido entre los aliados de la exministra a una nueva
purga en el seno del Grupo Parlamentario. Este martes se determina la
composición final del PSOE en la Cámara baja, después de que Rubalcaba anunciara
que los integrantes de la Ejecutiva Federal no podrían compatibilizar su puesto
con una potavocía en el Congreso. “Hay que repartir juego”, advirtió el líder
socialista, pero los chaconistas no creyeron que estas palabras fueran
dedicadas a ellos.
Con un grupo de solo 110 diputados y el poder regional y municipal evaporado,
los cargos no abundan en el PSOE. Las plazas en las comisiones parlamentarias
son unos de los pocos restos a repartir, por lo que quienes han combatido del
lado de Rubalcaba esperan ahora su recompensa. El relevo de los miembros de
la dirección de Ferraz deja libres once puestos de portavoz, pero la
tradición en el partido es que todos los cargos se ponen a disposición del nuevo
secretario general. De este modo, los cambios podrían ampliarse a portavocías
adjuntas, así como a los puestos en las presidencias, vicepresidencias y
secretarías de las comisiones.
En la primera selección de portavoces, al inicio de la legislatura, Chacón
apenas pudo colocar figuras afines, pero ahora este sector puede quedarse con
una representación todavía más testimonial. Así lo aseguran diversos diputados
consultados, aunque matizan que han recibido mensajes tranquilizadores del
entorno de Rubalcaba. Entre los que se la juegan están Leire Pajín,
portavoz de Medio Ambiente; Torres Mora, de Cultura; Carmen Montón, de
Igualdad; Federico Buyolo, adjunto en Cultura y secretario de Educación;
Esperança Esteve, de Seguridad Social; Ximo Puig, de Industria;
Herick Campos, adjunto en Industria; o Patricia Hernández, adjunta
en Empleo.
De la batalla del Congreso a las agrupaciones
Por otra parte, miembros destacados de la candidatura de Chacón ocupan
cargos institucionales, como Cristina Narbona, vicepresidenta segunda
en la Comisión de Sanidad; José Zaragoza, vicepresidente segundo en Interior; o
Francisco Caamaño, que ejerce el mismo cargo en la Comisión
Constitucional. Además, este tipo de nombramientos no solo tienen como
recompensa la participación en el grupo parlamentario o la notoriedad, sino
que conllevan un jugoso redondeo al salario diputado: los
presidentes cobran un suplemento de 1.431,31 euros mensuales; los
vicepresidentes, 1.046,48 euros; los secretarios, 697,65 euros; los portavoces,
1.046,48; y los adjuntos, 697,65 euros.
Pero si bien Rubalcaba parece haber tomado por completo el control tanto de
Ferraz como de los grupos parlamentarios, todavía debe sofocar los núcleos de
resistencia en las diferentes federaciones. Los críticos han regresado a sus
agrupaciones, y ahora plantean la batalla de los liderazgos
regionales.
En Madrid, Tomás Gómez se dispone a resistir el asalto de la oposición
rubalcabista, mientras que en Valencia, la alianza contra Jorge
Alarte trata de recuperarse del revés de la derrota de Chacón de la mano de
Pajín y Puig. La victoria de Rubalcaba también ha dado alas al barón
gallego Pachi Vázquez o al alcalde de Toledo, Emiliano
García-Page, que ya sueña con sustituir a José María Barreda en
Castilla-La Mancha. El futuro de Chacón depende en gran medida de cómo resulte
este nuevo mapa de poder orgánico en el PSOE.
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