Técnicas infalibles para no 'caer en el olvido'
Cinco métodos para ejercitar la memoria del campeón mundial
de retentiva en ocho ocasiones Dominic O'Brien.
Fechas, rostros, contraseñas, nombres... la lista de palabras y números que
hay que recordar es innumerable, pero, por desgracia, no es inolvidable.
El campeón de memoria en ocho ocasiones Dominic O'Brien ha publicado
'Consigue una memoria asombrosa' (Paidós), un libro para enseñar a
potenciar una herramienta que, según el autor, es necesaria para cosechar el
éxito. O'Brien propone estas técnicas y estos ejemplos para diferentes
situaciones.
1. Cadenas de asociaciones
Es el primer paso en la
carrera hacia una memoria asombrosa. Para empezar, lo mejor es asociar dos
palabras sencillas: bolígrafo y sopa. ¿Cómo las relaciona en el cerebro? Utilice
la imaginación: utilizar el boli para remover la sopa, usar la sopa como tinta
para escribir, sorberla con una pajita improvisada en un bolígrafo... Como dice
el autor, "la memoria y la asociación son inseparables".
2. Nombres y rostros
Para memorizar nombres y rostros
correspondientes hay que vincular esos nombres a imágenes. Imagine que conoce a
un tal Rupert Watts. Esa persona le puede recordar a alguien, por ejemplo, a su
dentista. El truco consiste en imaginarle con una bata blanca y, por otro lado,
asociar el nombre de pila con algún Rupert famoso, como lo es el magnate Robert
Murdoch. Si la persona a la que acaba de conocer no le recuerda ni a su médico,
ni a su vecino ni a nadie conocido, busque entonces un vínculo entre algún
aspecto físico de la persona y su nombre.
3. Contraseñas
Indispensable para no olvidar nunca más el
pin de su tarjeta. Si es el 2164, imagine que para acceder al banco tiene una
llave (como las de hotel) con el número 21. Cuando entra a la entidad, tararea
la canción 'When I'm sixty-four' de los Beatles. Uniendo esos dos pares de
número ya tiene la contraseña.
4. Método del vínculo
Es la técnica que aconseja O'Brien
para memorizar una lista de cosas, y consiste en establecer vínculos entre las
palabras que la forman, es decir, crear un entramado mental en el que una
palabra le lleve a otra. Ejemplo: Navego a la deriva en un
barco, al bajar a la orilla veo un neumático
que hago rodar hasta que choca con un paquete. Lo abro para ver
qué contiene: un botón rojo al que pulso y en ese momento
aparece una col debajo de la arena. Si la historia se graba en
su cerebro, no olvidará las palabras en negrita.
5. Método del viaje
Es como dibujar en la mente un mapa
con el recorrido diario: su casa, el garaje, la oficina, el colegio de sus
hijos... El truco consiste en vincular todos esos lugares con los alimentos que
componen la lista de la compra. Se trata de imaginar una escena donde la leche
esté en su salón, encuentre los huevos en el maletero de su coche, en la mesa de
su despacho estén los tomates y en el colegio de sus hijos vea el pan de molde.
La idea es que cuando piense en los lugares que recorre diariamente, le vengan a
la cabeza los productos que tiene que comprar.
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