LAS FUSIONES QUIEREN REDUCIR ASÍ EL NÚMERO DE DESPIDOS

Bancos y cajas abrirán de nuevo en horario de tarde gracias a la reforma laboral

Varias entidades bancarias en una calle. (Agencias) Eduardo Segovia -

Una consecuencia inesperada de la reforma laboral que acaba de poner en marcha el Gobierno será que el conjunto de la banca podrá volver a abrir sus oficinas por las tardes al recuperar el horario partido de 9 a 14 horas y de 16 a 18 frente al de 8 a 15 que impera en la actualidad. Estas aperturas van a comenzar por algunas cajas como NovaCaixaGalicia, Mare Nostrum y Banca Cívica, que van a mantener así a algunos empleados con contratos de media jornada para evitar su despido. Y, forzadas por esta competencia, va a hacer lo mismo la mayoría del resto de las entidades, empezando por las extranjeras, según fuentes conocedoras de la situación.

Este movimiento comenzó como una propuesta sindical dentro de los planes de reducción de plantilla de la primera oleada de fusiones de cajas, en una segunda fase después de las prejubilaciones masivas acometidas hasta ahora. "Después de estos recortes y para tratar de mantener todos los empleos posibles, propusimos varias fórmulas, entre ellas la contratación a media jornada de algunos de estos empleados, con lo que las entidades podrán abrir de nuevo en horario de tarde", explican fuentes sindicales.

Algunas entidades como Deutsche Bank ya abren sus oficinas por la tarde desde 2010, y ahora las citadas fusiones piensan aplicar esta fórmula de los contratos a tiempo parcial para hacer lo propio. Y la extrema competitividad del sector financiero en nuestro país provoca que detrás tenga que venir prácticamente el resto de bancos y cajas, según las fuentes consultadas.

Y ahí es donde entra la reforma laboral y la posibilidad que recoge de descolgarse de los convenios sectoriales. "Los convenios de bancos y cajas establecen un horario continuo desde hace años de 8 de la mañana a 3 de la tarde, pero ahora en cuanto una entidad tenga tres trimestres consecutivos de caída de ingresos -y ya los tienen todas- puede descolgarse del convenio en todos sus aspectos, incluido éste", explica un experto laboralista.

Otro añade que no se trata de alargar las horas de la jornada (siete en la actualidad), sino de repartirlas de otra forma, en horario partido en vez de continuo. "Esto no es ninguna novedad, sino que se trata de volver al sistema que regía hasta hace unos años cuando lo normal era abrir por las tardes".

¿Es rentable abrir por la tarde?

Ahora bien, esta situación genera cierta polémica por cuanto la apertura vespertina se eliminó, precisamente, porque no era rentable para las entidades. "Abrir por la tarde es perder dinero, en esas horas no se hace negocio", señalan en varias entidades que aseguran que, de momento, no se están planteando esta posibilidad. Las fuentes sindicales citadas explican que "sólo es rentable con contratos de media jornada, no ampliando horarios ni redistribuyendo el horario".

"Pero si hay un grupo relevante de entidades que empieza a abrir por la tarde, las demás no tendrán más remedio que seguir su ejemplo: nadie se puede permitir perder cuota de mercado en un momento como el actual de caída del negocio, contracción de márgenes y aumento imparable de la morosidad", advierte otro experto en el sector.

Adiós a los segundos trabajos

Este nuevo horario puede causar graves perjuicios a un número considerable de empleados de banca que tenían un segundo trabajo gracias al horario continuo del que disfrutaban hasta ahora en la sucursal. "Mucha gente tenía su trabajo de mañana en el banco y su trabajo de tarde en otro sitio, incluso su pequeño despachito de asesoría financiera", explica una de las fuentes consultadas.

"Esta gente va a tener que renunciar al segundo empleo y, en consecuencia, a una parte importante de sus ingresos si les obligan a trabajar hasta las 6 de la tarde, así que la medida de abrir por las tardes reorganizando los horarios seguramente va a encontrar una fuerte respuesta de los representantes de los trabajadores", concluye uno de los laboralistas.