Blesa y Aznar: una caja
saqueada y la responsabilidad sin aclarar
Mientras la Asociación de la Prensa de Madrid
(APM) eligió a 40 privilegiados asociados para que viajasen al Mundial de Brasil pagados
por Iberdrola,
infringiendo así uno de los principales artículos de su Código Ético (considera
corrupción recibir dádivas de las empresas sobre las que se informa u opina) y
en cambio abronca a Jordi
Évole por su “Operación
Palace” y a la revista del corazón “Diez Minutos” por
una intranscendente “entrevista imaginaria” con Leticia Ortiz, otros periodistas
españoles se juegan sus manos investigando, descubriendo y escribiendo sobre
los correos corporativos del banquero Miguel
Blesa (Caja
Madrid-Bankia). El ex presidente del Gobierno, José María Aznar,
ha denunciado a Infolibre,
Eldiario, El Economista, El País e incluso al periodista
conservador y monárquico Graciano
Palomo (El
Confidencial) por la difusión de estos correos, mientras que
otros medios como 20
Minutos, El Mundo, Interviú e incluso el Partido X, que
también los difundieron, no han gozado de momento de ese “privilegio”
aznariano. “Espía en
el Congreso” reúne todos los correos para ofrecérselos a sus
lectores y que puedan juzgar por sí mismos como se llegó a la multimillonaria
quiebra de Caja
Madrid y Bankia.
La prensa los silencia por temor a sufrir las represalias y embates de los
poderosos porque como ya decía Larra
hace dos siglos,
“escribir en España es llorar”. Mucho ha llovido pero poco ha
cambiado desde entonces. Leer más de esta entrada