Se puede derogar una
constitución, si ha dejado de servir, pero no se la debe marginar o mancillar
diariamente.
Vivimos como podemos, en este
país siempre mal gobernado, sobrevivimos bajo el yugo de los pillajes y del
absolutismo bipartidista.
Vivimos bajo el imperio de una ley aplicada al
pobre sin misericordia, mientras a los presuntos defraudadores y evasores de
divisas les dejamos al pairo de sus caprichos, la Constitución es una norma que
se aplica anormalmente.
A los pobres, ...se les abandona a su suerte, sin que se cumpla un
precepto claro de la Carta Magna. Art 39, 1, bastaría línea y media para acabar
con la hambruna.
Después de 206 años ni siquiera recordamos que en
1808 se decía en la Constitución de ese año: Art. 8º.
"También está obligado todo español, sin distinción alguna, a contribuir
en proporción de sus haberes para los gastos del Estado."
Salvo la marginación total a la mujer en
"La Pepa" entre otros, sería este artículo el que hizo que durara
solo 23 meses y medio.
Hoy en Batres, donde dice que vivió Garcilaso de La
Vega, como Quevedo, he mirado los muros de la patria mía.
García Márquez decía que, la América Latina
llevaba "Cien años de soledad" los pobres españoles llevan y llevamos
más de 2000 años, la sandalia o la bota del capital nos limitaba y nos limita
la respiración, acción vital de la existencia.
Y a pesar de todo, soy constitucionalista,
creo en la norma, pero jamás en los que la guardan en un cajón o estante y la
violan cada amanecer.
JOSMAN.
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Publicado por Blogger para JOSMAN
(JOSé MANuel García García) el 8/24/2014 11:12:00 a. m.
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