Las bases de UPyD no tragan con la corrupción del régimen
El eurodiputado Francisco
Sosa Wagner ha sido el último, pero no el primero: Unión,
Progreso y Democracia (UPyD), el partido que dirige Rosa Díez, con la
estrecha colaboración de los diputados Toni
Cantó y Carlos Martínez Gorriarán, ha entrado en fase de
descomposición y, si no lo remedia, dejará de ser alternancia sobre todo al PP
y PSOE. Las acusaciones de corrupción contra Rosa Díez, que escondió un
privilegiado e inmoral fondo de pensiones con dinero público en Luxemburgo y se
justificó con parecidas explicaciones a las de Dolores de Cospedal con el tesorero Luis Bárcenas –“se trata de una cotización
“diferida”– ha dejado tocado al partido que inicialmente se
presentó como adalid contra las masivas corruptelas y privilegios políticos. Su
posterior alianza con el actual régimen partitocrático, buscando allanar el
camino para futuros pactos municipales y autonómicos en 2015, ha sido la
puntilla. Leer más de esta entrada