LOS 'OPRIMIDOS' ¿PRINCIPIO DEL FIN?
Rafael del
Barco Carreras
Barcelona
14-7-2019. Oprimidos o vividores del cuento nacional-catalanista.
Víctimas y conquistados por el Imperio Español. Con piscina en la primera y
segunda residencia. Los mejores restaurantes del Mundo. El lujo de la más
exquisita Europa. Gozando de la capitalidad europea de la droga y prostitución.
Hipócritas adictos a Montserrat, o al Tagamanent, con curas o monjes y obispos
fanáticos y visionarios. Y a más inri repito con el místico Junqueras que
desde la cárcel justifica su 'revolución' con las cartas del apóstol Santiago o
el propio papa Francisco.
La
región más corrupta de Europa, donde la corrupción crea personajes como
Pujol y la Ferrusola o sus hijos, imposibles en tiempo y cantidades en
cualquier lugar del Mundo, además impunes e inmunes. O todo posible con 2
millones de votantes capaces de jurar que 'Madrid nos roba', o en los 50
o 60 del siglo pasado cuando el Barça perdía fuera por orden directa de Franco
a los árbitros.
Y ahora leo
que el disparate se acaba, que la sentencia contra el PROCÉS les enviará al baul de
los recuerdos. O al siglo XIX cuando se inventaron sus fantasías y superioridad
racial explotando a los charnegos, o españoles de más allá del Ebro, en sus
fábricas y obras.
Pues no lo
creo.
Insisto y repetiré que luchan por los mejores sueldos públicos de España con
promedios de 100.000 euros más gastos y viajes. Una pseudosecta que domina toda
la administración catalana. Una secta que cobra el 3 o 20% en negro de sus
concesiones públicas. Simonía al igual que aquellas bulas o repartos religiosos
propios del medioevo. O subvenciones a la prensa convertida en comprada y
propia con el argumento del catalán o 'normalización lingüistica', y la
'educación pública' fabrica de adictos y fanáticos.
Una secta
que sin duda tiene acojonados a los intelectualoides de izquierda dominando
prensa y Poder madrileño. Una izquierda madrileña dicen empeñada en el 'diálogo'. Diálodo
del 'sí o sí'. Una secta minoría enquistada, corrupta, que se cisca en la Ley y
la Constitución, justificando en un 'mandato democrático' o 'libertad de
expresión' su rebelión o sedición, y malversación más desobediencia.
Multimillonarios delincuentes con credo o mandamientos propios.
Una minoría
que mantiene una República de Cataluña con un loco presidente instalado en un
palacete de Waterloo. Alucinante disparate. Y la única solución, puesto que los
infantiles y psicóticos o xenófobos odios populistas y localistas perduran
varias generaciones, fuera cortarles cualquier fuente de dinero
impidiéndoles la 'malversación' o 'corrupción institucionalizada' fuente de su
Poder.