El juez Ruz no pudo reabrir el caso Faisán (Rubalcaba, Camacho, García Hidalgo) en plena campaña electoral porque la Fiscalía le envió con retraso la documentación El pasado 21 de septiembre, los 14 magistrados de la sala de lo Penal de la Audiencia Nacional decidieron revocar los procesamientos, dictados por Pablo Ruz, de los tres altos mandos policiales Víctor García-Hidalgo, Enrique Pamiés y José María Ballesteros, por su presunta implicación en el ‘chivatazo’ a ETA en mayo de 2006. Dos semanas después, los jueces redactaron el auto con sus conclusiones, instando al propio Ruz a tomar una determinación sobre el caso: abrir un juicio oral, enviar la instrucción a los juzgados de Irún, o ampliar la investigación realizada hasta entonces, calificada por algunos de esos magistrados como “inconsistente”. Pues bien, según ha sabido El Confidencial Digital, el juez de la Audiencia Nacional pidió el envío urgente del auto elaborado en la Sala de lo Penal, con el objetivo de reabrir la investigación del ‘chivatazo’ centrándose en los pesquisas policiales señaladas como “erróneas” por parte de los magistrados. Sin embargo, a Pablo Ruz le ha resultado imposible realizar cualquier nuevo movimiento en el último mes, ya que su petición no fue atendida por la Fiscalía hasta la semana pasada, cuando por fin envió al juez la documentación solicitada. En concreto, el auto no estuvo en sus manos hasta el miércoles 16 de noviembre, tan sólo cuatro días antes de las elecciones generales. Desde entonces, el magistrado está estudiando el documento para reabrir la investigación en las próximas semanas. “Un retraso manifiesto” Las fuentes consultadas por ECD explican que “ha habido un retraso manifiesto en la entrega del auto, ya que normalmente no se tarda más de siete días en enviar ese tipo de documentos desde el momento de su solicitud, por lo que el juez Pablo Ruz tendría que haber recibido las conclusiones de la Sala de lo Penal el 11 de noviembre como tarde”. De cumplirse los plazos habituales, “el auto habría llegado en plena campaña electoral, y la reapertura de la investigación –un secreto a voces en la Audiencia Nacional- se podía haber anunciado antes del 20-N”. La celebración de las elecciones generales fue, a juicio de las fuentes antes citadas, el principal motivo del retraso en el envío del auto: “Está claro que la Fiscalía no quería que se volviese a hablar del caso Faisán justo antes de los comicios, sobre todo cuando Alfredo Pérez Rubalcaba, ministro del Interior durante el ‘chivatazo’, era uno de los candidatos a la presidencia del Gobierno”. |
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