“Apto con limitaciones”. El servicio médico de la Guardia Civil está intentando reincorporar a agentes con “incapacidad irreversible” y a otros que fueron víctimas de terrorismo
Agentes de la Guardia Civil, en situación de baja por lesiones físicas y
psíquicas irreversibles –algunas causadas por atentado terrorista-, han tenido
que recurrir a la Audiencia Nacional para que se les concediera el pase a la
jubilación por incapacidad. Los servicios de evaluación médica del Cuerpo les
obligaban a reincorporarse en situación de 'apto con limitaciones'.
Para algunos de los agentes consultados por El Confidencial
Digital, la situaciones generadas por los informes del
SEPEC (Servicio Permanente de Evaluación y Clasificación) “son
insostenibles”. Denuncian que el Servicio de Asistencia
Sanitaria de la Guardia Civil les han intentado dar de alta de forma
parcial, a través de una figura denominada ‘apto con
limitaciones’.
En la práctica, esta calificación implica que agentes dados de baja por
problemas psicológicos o físicos “irreversibles” se
reincorporan de nuevo al Cuerpo pero con una serie de límites,
cuanto menos, curiosas.
Las del SEPEC (Servicio Permanente de Evaluación y Clasificación), elaborados
por una junta médico pericial, concluyen que los agentes deben volver al
trabajo, pero en puestos “que no conlleven estrés, que no sea
necesario conducir vehículos a motor, que no deban
portar armas y que no deban tomar decisiones
autónomas”.
Esto ha motivado que la mayoría de agentes que se encuentran en estos casos
hayan tenido que recurrir a la vía judicial para resolver sus casos. La
Audiencia Nacional, según las fuentes consultadas por
El Confidencial Digital y la documentación que obra en
poder de este periódico, les ha dado la razón.
"Trastorno de estrés postraumático
crónico"
Algunos de los casos que ha conocido este confidencial revisten especial
gravedad. Sus protagonistas son agentes que se encuentran de baja tras haber
sufrido en persona atentados terroristas de ETA e incluso de terrorismo
islamista.
ECD ha tenido acceso a un expediente concreto, en el que la Junta
Medico Pericial Ordinaria dictaminó que un agente sufría “trastorno de
estrés postraumático crónico” a raíz de la explosión de un coche bomba
colocado por ETA en un acuartelamiento de la Guardia Civil, cuando la
víctima se encontraba junto a su familia a una distancia próxima.
El Servicio de Recursos Humanos de la Dirección General de la Policía y de la
Guardia Civil comunicó al interesado su resolución: era
destinable en cualquier puesto que cumpliera
los requisitos arriba citados.
Fuentes de la Guardia Civil, consultadas por ECD,
aseguran que esas limitaciones en la práctica imposibilitan de forma absoluta
cualquier tipo de puesto. Sobre todo la que se refiere a “tomar
decisiones autónomas”.
Ante esta situación, y siguiendo el consejo de otros agentes que habían
pasado por la misma situación anteriormente, se acudió a la vía
judicial y se presentó un recurso administrativo.
El proceso finalizó con una sentencia de la Audiencia
Nacional, en la que fallaba que la resolución de los servicios médicos
de la Guardia Civil no era conforme al derecho, “declarando la
inutilidad permanente para el servicio del recurrente por insuficiencia de
condiciones psicofísicas”.
|