CAN BRIANS, encierro de
funcionarios de las prisiones catalanas contra los recortes.
Jamás un encierro por las
transgresiones y ataques contra los Derechos Humanos.
Rafael del Barco Carreras
Barcelona 7-03-2012. Los encierros y manifestaciones en las
cárceles catalanas ya casi no son noticia. Los recortes de sueldos y plantillas
(los contratados) provocan al igual que en sanidad o enseñanza, y en general
todos los servicios públicos (mossos y transportes), constantes altercados
callejeros. Pero añado que evidencian situaciones internas que con Crisis y
recortes, o sin, se debían atajar.
Otro encierro en CAN BRIANS
2. Es una lástima que entre los motivos de tanta queja jamás hayan
incluido las irregularidades o manifiestos ataques contra los derechos humanos
de los presos. Y los hay a miles. Otro detalle, la rebaja de plantillas no
afectará a la circulación de DROGAS, pues
el único el freno radica en la capacidad de compra del preso que la
pretenda.
Javier de la Rosa, en la reciente entrevista en el
subvencionado diario ARA, se enorgullece
de haber pasado en la cárcel mucho menos de lo que la gente cree, sic. Como he
escrito y escribiré, sin duda se debe, no a sus varias condenas sumando un
mínimo de quince años, sino a la especial aplicación de la Ley y Reglamento
Penitenciario en Cataluña, en Can Brians y en otras cárceles. Como me dijo con
toda tranquilidad un “psicólogo”; “es un
caso especial”. Pero insisto, lo especial se aplicó de nuevo con Juan Piqué
Vidal… o Sala y Folchi y otros menos célebres.
Por desgracia comprobé las diferentes varas de medir del
Régimen catalán. La Gran Corrupción se había instalado en sus cárceles.
Arbitrariedad, la lotería de las redenciones de condena, días de rebaja.
Inmensos trámites burocráticos que se alargan o acortan según conveniencias.
Infinidad de burócratas con ínfulas psicológicas rellenando formularios que poco
o nada “rehabilitan”. Complejos y absurdos programas para progresión de grado o
simple colocación en módulos más o menos duros. Total, un cúmulo de
despropósitos que lejos de “rehabilitar” crean frustraciones o resentimientos
con terribles reacciones. Violadores y asesinos han reincidido con extrema
brutalidad. Casos Bellbitge o Nou Barris.
Si el desmadre autonómico ha conseguido quebrar España, las
cárceles catalanes transferidas a la Generalitat de Pujol por los 80, serían el
más claro referente de todos los males del Estado de las Autonomías. Desde la
construcción donde el amiguismo pujolista, o socialista en Brians DOS, se llevan
los contratos (con operaciones financieras a largo plazo o “eterna renovación”
en las caixas) hasta la quiebra del catering BON SERVEI… o la compraventa de
“beneficios penitenciarios”, el actual CASO
MACEDONIA de policías y funcionarios corruptos. Un caso donde se ataca
hasta al juez que lo instruye, reacción muy propia de la administración catalana
cuando intenta obstaculizar sumarios.
He sostenido infinidad de veces que dudo muy mucho de la
“rehabilitación”. Una mentira repetida mil veces jamás será verdad por mucho que
se empeñen. Nadie, a suponer el papel de la Prensa, ha dudado de un dogma del
“progresismo” que más allá de contratar miles de “profesionales” (las comillas
serían del todo justificadas en el Dr. Morín, caso clínicas abortivas) dudo sirva para nada más. E insisto, en
demasiados casos “torturar” psicológicamente al pretendido a “rehabilitar”. La
prisión, que duda cabe, es disuasión ante el delito y castigo al delincuente
(frase de manual) que además sirva para “abuso del Poder”, es una realidad
repetida a lo largo de la Historia. Que disuada y castigue, relativamente
cierto, que rehabilite, totalmente falso, por más que afirmarlo con rotundidad
no sea ni social ni políticamente correcto.
También sería interesante un estudio (por supuesto a realizar
por alguien ajeno no ya solo a la Generalitat sino a Cataluña) de las “fugas” en
permisos y “salidas programadas”. He escrito tanto sobre Can Brians y cárceles
que no me apetece extenderme. Quizá sea el único “recorte autonómico”, que por
haber padecido su necesidad, lo apruebe con demasiado conocimiento de causa;
entre ellas, por culpa de su maldita burocracia… o por corrupción pura y dura…
salir SIETE días después de cumplida completamente la condena. En 2004 escribir
contra el Régimen era tan peligroso como en tiempos contra Franco… y yo ya había
escrito demasiado.
Consultar “Can Brians” en www.lagrancorrupcion.blogspot.com
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