Autos para ricos y para pobres
En el riquísimo idioma español, al automóvil, se le puede denominar auto,
coche, carro... incluso “berlina”; por ello he elegido el más chic, por aquello
de la ostentación, la presunción de ascendencia en la escala social y en fin...
todo lo que conlleva lucir un automóvil propio y bien dotado; o incluso para los
insaciables; bien... “tuneado”; palabra ésta no aceptada aún por la academia,
pero que significa a esos automóviles, a los que les colocan tantas cosas
adicionales, que no me extrañaría si alguno le pusiera ya... hasta pecera, con
peces orientales vivos.
Pues
bien, el “auto” ha sido el motor de lo que se ha denominado progreso (y que en
cierta o gran medida lo es) puesto que “a caballo” de las cuatro ruedas del
automóvil y “la inmensa manta de asfalto en forma de grandes tiras”; el mundo o
casi todo el mundo, puede ser rodado y con ello (y los vehículos mayores y de
transporte de mercancías, amén del ferrocarril) el consumo de todo y por todo
aquel que lo puede costear, es aún el no va más... tan es así, que en enero
puedes comer “cerezas del cono sur de América” y todo el año, frutas de Brasil y
otros lugares, hasta no hace mucho inalcanzables. Y no me digan que vienen en
avión, que lo sé... pero desde el aeropuerto hasta lugares como por ejemplo,
donde yo vivo... hay horas de transporte por carretera y con los camiones
apropiados para ciertos transportes.
Pero
llega la crisis... luego la recesión y ahora la depresión... puesto que los que
nos mangonean (gobernar es otra cosa) nos han ido... “metiendo los supositorios
(económicos) en dosis para irnos engañando a plazos; puesto que la verdad es que
la recesión empezó tan pronto se generalizó la crisis”.
En esta
situación en que el dinero ha desaparecido de la circulación; o al menos el
dinero “motor”; está bien guardado en Suiza y demás paraísos fiscales; entre las
mermas de consumo en el antes rico mercado occidental; ha entrado la del
automóvil, que a su vez y en cadena interminable produce otros muchos consumos,
que a su vez merman ostensiblemente, una economía encadenada
y...?
No es
que ya no se vendan en la cantidad pretendida, los automóviles nuevos; es que no
se venden los de segunda mano y es más, es que cada vez abundan más (al menos
donde yo vivo) los cartelitos en plena calle y colocados en los cristales del
“auto”, con el letrero de se vende. También observo que va habiendo cada vez más
lugares donde aparcar en mi barrio; antes “atestado” de vehículos y que lo
ocupaban todo... hasta lo prohibido, aceras incluidas.
No
sólo no aumentan los automóviles en circulación, sino que el que aún lo tiene y
por escasez de dinero, lo tiene aparcado y lo usa cuando ya no tiene más
remedio, puesto que el combustible, debido al precio y la enorme carga de
impuestos que el Estado le ha colocado... el litro de gasolina o gasoil ya
resulta tan caro, como una buena colonia de las que empleamos para el baño, o
más aún.
Por
ello... “hasta la Mercedes”, elimina empleados en España; y los distribuidores
de automóviles, en general; están mermando plantilla y no sé si las gasolineras
estarán haciendo lo mismo, puesto que cuando boy a repostar, el movimiento de
sólo hace unos meses, en la que reposto (que es grande y con bastantes postes de
suministro) se ve que la afluencia de clientes ha mermado
sensiblemente.
No obstante hay una
noticia que creo positiva... la “SEAT” (fábrica antes española (“Sociedad
Española de Automóviles de Turismo”) ahora alemana), dice haber despachado
350.000 “autos” en 2011, equivalente al 31 % más que en 2010;
supongo que los habrá exportado a... “esos países emergentes y que no conocen la
depresión que aquí nos asola”; y me alegro por los obreros catalanes que de
momento, pueden dormir tranquilos... esperemos que en este año... “la suerte les
acompañe”.
Pero
ahora viene la noticia “bomba” o al menos sorprendente y que nos puede hacer
reír de la forma que queramos hacerlo; puesto que si bien, “el auto para el
proletariado occidental, clases medias, o acomodadas... está en recesión
manifiesta”, no lo están los automóviles de lujo, o de “alta gama”;
blindados, etc., y como aquí hasta ayer mismo, adquirían (con nuestro dinero)
los sinvergüenzas y sin escrúpulos, políticos que son los que nos han llevado a
la ruina actual... coches que al entrar “los nuevos” y para de alguna manera ir
“justificándose”, los sacan a subasta y no los quiere nadie; sencillamente por
que nadie en su sano juicio, se compra un coche cuyo mantenimiento es muy
costoso y que solo se permitían, los que reitero... “les pagamos el auto y el
mantenimiento del mismo; y que van desde el rey y su casa (con casi cien
automóviles y otros tantos chóferes) pasando por la del presidente del gobierno,
que debe tener otras cuantas docenas y no sólo por los que él emplee, sino por
la corte que le ha dejado el devastador antecesor y que no sabemos hasta dónde
la ha reducido... y así, hasta a miles de concejales que siguen empleando coche
“oficial” como si de su propiedad fuera y lo pagasen y mantuviesen ellos.
Y la
“bomba” es también que, aparte de los de alta gama (Mercedes, BMW, Audi,
Maseratti y demás por el estilo) la marca “Roll-Royce”; ha vendido en 2011 la
friolera de 3.538 “autos” y que equivalen a un 30,5% de aumento sobre el
2010. Todo ello nos lleva a lo que cada vez está más claro... “o sea, que
cada vez hay más ricos; y en forma muchísimo más amplia, cada vez hay más
pobres”. Y esto se demuestra viendo estas cifras y observando igualmente...
“la ya obscena ostentación de algunos y la miseria que padecen ya incontables
millones”... o sea que el mundo sigue igual, que
cuando gobernaban aquellos sátrapas que cuenta la historia... hoy son otros y
otras formas, pero el resultado es el mismo.
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