MOVIMIENTOS INTERNOS EN EL PSOE

La semana en que Blanco criticó a Rubalcaba y Chacón se ‘estrenó’ en el Congreso

El diputado por Lugo, José Blanco, será vicepresidente de la Comisión de Industria del Congreso (EFE). Alberto Mendoza - 

El PSOE continúa en fase de recuperación y cualquier movimiento interno se interpreta en clave de lucha de poder. Esta semana ha destacado la reaparición en el Congreso de dos figuras con una discreta vida parlamentaria: José Blanco y Carme Chacón. Tras meses arrinconado en una segunda fila, el exvicesecretario general aprovechó la reunión del Grupo Socialista para cuestionar la estrategia de su partido en la renovación de RTVE; mientras que la exministra de Defensa se estrenó con su primera pregunta en la Cámara después de seis meses de silencio. Unos movimientos que se suman a las fuertes críticas vertidas por Tomás Gómez contraAlfredo Pérez Rubalcaba, a quien comparó con un "boxeador desorientado".

Como otros miembros del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, Blanco ha tenido que adaptarse a su nuevo rol secundario, pero el exministro de Fomento, exportavoz del Ejecutivo y exvicesecretario general del PSOE todavía conserva energías para robar algún titular. El martes, en la reunión del Grupo Socialista en el Congreso, arremetió contra la dirección federal por negarse a tener presencia en el Consejo de RTVE, después del golpe de mano del PP para elegir a su presiente.  

Blanco sostuvo que es un error renunciar a la plaza que su formación podría tener en el Consejo de la corporación pública, pese a la mayoría del PP en este órgano, ya que deja a los socialistas sin una antena política en la cúpula de RTVE. Estos cargos se renuevan cada seis años, por lo que, incluso si el PSOE volviera al poder en las próximas generales, seguiría sin contar con consejeros propios.

La encargada de contestar al exministro, según fuentes socialistas, fue la portavoz del Grupo, Soraya Rodríguez, quien defendió la estrategia de Ferraz como respuesta a la toma unilateral del PP de la presidencia de RTVE. El PSOE tomó esta decisión para no participar de lo que consideraron una “farsa”, y anunció que llevaría ante el Tribunal Constitucional el decreto del Gobierno por el que se permite elegir al presidente de la corporación por mayoría absoluta, en lugar de por los tres quintos del Parlamento.

Sin embargo, estas explicaciones no parecieron satisfacer a Blanco, a juzgar por la opinión de otros diputados del PSOE. Y es que la decisión de renunciar a la presencia en RTVE resulta insólita a los ojos de diversos parlamentarios socialistas, dado que no es una práctica muy habitual en política, y el partido no está sobrado de puestos institucionales. En todo caso, Alfredo Pérez Rubalcaba se guarda una carta en la manga, ya que todavía cuenta con el periodista Miguel Ángel Sacaluga en el Consejo, quien deberá ser relevado en enero, y por entonces Ferraz puede haber cambiado de opinión sobre esta materia.

Por otra parte, el renovado protagonismo de Blanco también ha despertado algún comentario irónico entre sus colegas. Y es que llega después de meses arrinconado como vicepresidente segundo de la Comisión de Industria, intentando pasar página sobre las sospechas de corrupción, y justo cuando se conoce que, como ministro, encargó un retrato de Francisco Álvarez Cascos de 190.000 euros. Otra de las escasas noticias protagonizadas recientemente por el exvicesecretario tampoco fue muy positiva, puesto que se trataba de sus lamentos por no haber sido invitado a la presentación de los nuevos trenes híbridos destinados al trayecto entre Madrid y Galicia.

Chacón recupera la voz en el Congreso

No obstante, no se trata de la primera vez que Blanco acapara cierto protagonismo en los debates del Grupo. A propósito de la crisis de Bankia, tomó la palabra en al menos dos reuniones, incluyendo la del 29 de mayo, cuando Chacón lanzó un pulso a Rubalcaba para que el PSOE exigiera una comisión de investigación. Blanco se mostró favorable  a la comisión, pero recordó que entonces todos los consejeros socialistas en las entidades financieras con problemas deberían dimitir, comenzando por los que continúan en la matriz de Bankia. Algo que la exministra de Defensa y Tomás Gómez han pasado por alto.

Por su parte, Chacón parece haber decidido justificar su elección como diputada, y el miércoles llevó a cabo su primera intervención parlamentaria. Fue en la Comisión de Fomento, donde interrogó al secretario de Estado de Infraestructuras, Rafael Catalá, por el estado de las inversiones en su comunidad. “¿Cree que el presupuesto del Ministerio de Fomento cumple con las necesidades en infraestructuras de Catalunya?”, preguntó, para criticar además la agenda de “recortes y recortes” del PP.

Chacón ha necesitado que pasen seis meses de legislatura para intervenir en el Congreso, aunque ha presentado 30 preguntas por escrito al Gobierno, siempre relativas a cuestiones de localidades de Cataluña. El resto de sus apariciones, aparte de sus críticas en el seno del Grupo Socialista, se han limitado a la presentación de un libro sobre el mandato de Zapatero y ados mítines para festejar la Fiesta de la Rosa del PSOE en su comunidad autónoma. El lunes, volverá a protagonizar otra presentación literaria, en este caso, en la sede del PSM

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