BRUSELAS Y LOS SUELDOS ESPAÑOLES
Rafael del Barco Carreras
Barcelona
6-03-2014. Tras sacarnos de la lista de países con desequilibrios excesivos,
Bruselas pide reducir salarios. Debería puntualizar, porque desde la reforma
laboral en España se contrata ¡y sobra gente! por 400 euros y menos a tiempo
parcial. El coste de un esclavo. Deberán calcular los hidratos de carbono o
calorías necesarias para mantener vivo al indispensable trabajador, quizá baste
con 200 € al mes, si refuerza la dieta en comedores sociales, duerme debajo de
un puente, y se viste en Cáritas.
Supongo
que Olli Rehn, comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios,
tampoco se refiere a la masa laboral en activo, donde se despide a mansalva y
se contrata de nuevo reduciendo salarios, sumiendo a millones de trabajadores
españoles por debajo de las ayudas sociales en cualquier país nórdico, y por
supuesto impagando hipotecas y alquileres, o los básicos y en constante
aumento, agua, gas y electricidad. Se debe referir a unos diez millones que
trabajando en empresas más o menos sanas aguantan sus salarios, o bien a los
tres o cuatro millones de funcionarios públicos y similares varias veces
rebajados.
Seguro
que Olli Rehn, ante la lista de los 16 millones de cotizantes a la
seguridad social o con las declaraciones de la renta, se ha echado las manos a
la cabeza, y su generalizada advertencia se refiere a los banqueros y sus
adjuntos del cartel banca-estado, los directivos de oligopolios o reales monopolios,
cargos en miles de empresas públicas y similares, o los políticos y cargos
medios y altos con sus dietas y dobles sueldos. Cifras que oscilando entre 100.000
o varios millones de euros al año, aplastan la globalizada competitividad.
También
aconseja rebajar cuotas sociales aumentando otros tipos impositivos. Es
fácil decirlo, o Bruselas no tiene ni idea de la realidad española, que por
desgracia la conoce al dedillo, o cree que con cataplasmas y discursos sujetará
los privilegios de las elefantiásicas cifras que encabezan cotizaciones de SSSS
y declaración de la renta.
Merkel, que por suerte para España tiene demasiados problemas para
entrar sin excesivas cautelas sobre España, cómo venía haciendo en su anterior
mandato, no pierde ocasión apuntando hacia el BCE y su alegría en cuanto
a liquidez y compra de deuda pública, consciente que se alimentan déficit y
situaciones de agravio, repercutiendo en la competitividad global.
Su
repetida llamada a la “reestructuración”, por mucho que Rajoy pretenda
darle sopas con honda, no solo no se ha iniciado en España, sino que arrasado
el “mercado laboral” se suben los impuestos, pretendiendo aguantar con ellos y
deuda pública un Régimen que asume el 26% de paro, otro tanto de economía
sumergida, las disparatadas comunidades autonómicas, más una corrupción que ha
dilapidado y desfalcado la mitad de su sistema financiero, llenando saldos en
Suiza y todos los paraísos fiscales, más inversiones opacas en Sudamérica.
Y
si la maldita broma de los salarios se amplia con declaraciones como las de
anteayer Pujol en su “Centre
d´Estudis”, Jordi
Pujol lamenta la "radical oposición" a reconocer el 'hecho
catalán' y no el vasco en la Transición , con un “hecho diferencial catalán” que por si solo arruina
España…más pronto que tarde alguien detendrá el disparate, esperando que no sea
la Calle…
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