La avería de la Refinería que ayer provocó una nube tóxica sobre la ciudad, causó además un aumento severo y prolongado de los niveles de SO2 en todas las estaciones de control atmosférico de las que dispone la Red Municipal. Los valores obtenidos superan los límites de protección para la vegetación y fue susceptible de provocar episodios de lluvia ácida.
Las estaciones dependientes de REPSOL (Centro Cívico-La Grela y Pastoriza) y de la Xunta (Riazor y Torre Hércules) no ofrecen, curiosamente, datos del intervalo en cuanto a cifras de contaminación. Las estaciones dependientes de REPSOL son gestionadas por la Xunta de Galicia, pero no ofrecen datos de contaminación en tiempo real y de acceso público, ya que esa era una de las condiciones para la AUTORIZACIÓN AMBIENTAL INTEGRADA de la que dispone tanto Repsol como Alcoa.
ARCO IRIS ha denunciado en repetidas ocasiones esta intolerable situación, que transgrede y viola todas las directivas europeas en materia de acceso a la información ambiental y deja a los ciudadanos a merced de unas empresas cuya carga contaminante está afectando de forma grave y continuada a toda la ciudad. Por todo ello, ARCO IRIS insta a la Consellería de Medio Ambiente a integrar de forma inmediata a las dos estaciones de REPSOL y la de Alcoa en la red de Meteogalicia en tiempo real.
La CMA es la única responsable de mantener esta situación tercermundista para favorecer los intereses de Repsol, empresa que no solo causa un perjuicio mantenido para la salud de todos los coruñeses, sino que nos somete a una dictadura de precios energéticos que roza la tomadura de pelo. Los datos de polución no pueden bajo ningún concepto estar en poder exclusivamente de las empresas que la causan o de una administración que desiste sistemáticamente del cumplimiento de sus obligaciones con los ciudadanos.
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