Los ministros socialistas de Justicia, Caamaño y Teresa Fdez de la Vega, protegieron a jueces corruptos
El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) está a punto de decidir sobre la denuncia contra una amplia mafia de corrupción judicial que ha logrado anular un proceso contra dos jueces, lo que ha causado consternación, indignación ciudadana, rabia y estupor tras la decisión de la Audiencia Provincial de Las Palmas de dar "carpetazo" a la investigación de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. La investigación incriminaba a una red de magistrados, catedráticos y abogados corruptos, uno de los cuales había sido ascendido a "jefe de gabinete" (cargo de la máxima confianza de un político) por la vicepresidenta socialista del Gobierno Zapatero y también jueza, Teresa Fernández de la Vega, y era compañero de trabajo del ministro socialista de Justicia, Francisco Caamaño. La "anulación de pruebas" del "caso Unión", protagonizado por el empresario Luis Lleó para lograr un pelotazo urbanístico en Costa Roja (Lanzarote) mediante la compra de políticos, desencadenó una campaña de acoso y derribo al juez César Romero Pamparacuatro, que había detenido a la alcaldesa María Isabel Déniz, hermana de la jueza Carolina Déniz, la cual había dejado momentáneamente la toga para ejercer como alto cargo de Coalición Canaria. Leer más de esta entrada