La jubilación dorada de Bono: 11.000 euros al mes durante los próximos dos años

El ex presidente del Congreso de los Diputados, José Bono (EFE). Daniel Forcada

El socialista José Bono, uno de los políticos con mayor patrimonio personal, disfrutará de una jubilación dorada durante los próximos dos años como ex presidente del Congreso de los Diputados. La mesa de la Cámara Baja ha dado esta semana su visto bueno al estatus que disfrutará el político manchego hasta 2013: percibirá el 80% de su sueldo como presidente y tendrá, además, derecho a otros privilegios como un asistente y escolta de seguridad a cargo del presupuesto de la propia Cámara durante cuatro años.

El informe sobre la situación en la que queda Bono de ahora en adelante ha sido uno de los primeros papeles abordados por la nueva Mesa del Congreso de los Diputados, constituida el pasado martes, en las reuniones celebradas esta misma semana. El caso de Bono no es excepcional y cumple con la tradición que la Cámara reserva a sus máximos representantes. Todos ellos han recibido, al abandonar la presidencia, el 80% de su sueldo bruto, que con todos sus complementos, supone uno de los más altos del Estado, muy por encima del que percibe el propio presidente del Gobierno.

Así las cosas, Bono, que ha jurado que, ahora sí, se retira de forma definitiva de la política, percibirá, anualmente, 154.080,48 euros brutos, unos 11.000 euros mensuales. El presidente del Gobierno en funciones, José Luis Rodríguez Zapatero, que tiene derecho a un sueldo vitalicio como todos los ex presidentes, recibirá, por su parte, 84.000 euros anuales, el sueldo íntegro que viene cobrando desde que, en mayo de 2010, decidió recortar un 15% las retribuciones de los altos cargos del Ejecutivo.

La jubilación dorada de Bono será, sin embargo, menor de la que recibió en 2008 el también socialista Manuel Marín fruto de las medidas de austeridad impulsadas en el Congreso durante los últimos años de la crisis. Marín, que fue nombrado en 2008 presidente de la Fundación Iberdrola, cobró al dejar el cargo 170.000 euros de retribución (el 80% de los 212.110 que percibía entonces como presidente), más la indemnización por cese como diputado (hasta dos años de sueldo). En su caso, además, pudo añadir a todo ello la pensión vitalicia como ex comisario de la Unión Europea y que puede adelantar a los 60 años con un coeficiente reductor del 0,70% anual.

Bono asistió el martes a la constitución de las nuevas Cortes desde la tribuna de invitados, donde estuvo sentado junto a Juan Ramón Beloki, ex diputado del PNV y miembro de la Mesa del Congreso en la anterior legislatura. Según explicó en los corrillos con los periodistas del Día de la Constitución, su intención durante los próximos días es descansar e irse de viaje con su hija pequeña a Eurodisney. A muchos les cuesta creer, sin embargo, que el incombustible político manchego vaya a despedirse definitivamente de la primera línea de la política española. Sea como fuere, Bono disfrutará de una nada desdeñable situación económica mientras medita sobre su futuro y apura las últimas líneas de sus esperadas memorias por las que el Grupo Planeta ya le ha pagado 860.000 euros.