El tribunal especial de Landsdomur,
corte levantada hace más de un siglo para juzgar a miembros del Gobierno
islandés y hasta ahora virgen, ha
sentado hoy en el banquillo de los acusados al ex primer ministro conservador
Geir H. Haarde. El individuo que cortaba el bacalao que arruinó Islandia por
su falta de visión política, se sentó ayer en el banquillo acusado de haber
arruinado a su país.Si
es declarado culpable podría cumplir hasta dos años de cárcel. Tres años
han pasado desde el varapalo financiero que sumergió al país en 2008 en el
agujero negro de la crisis. Ahora Islandia superada la crisis está en la senda
del crecimiento y ya parece un mal sueño lo que hizo un mal
gobernante.
Tengo envidia de los
islandeses. Aquí,
sujetos como Zapatero que nos han llevado a la miseria contumaz no es que no
vayan a los tribunales a dar cuenta de sus fechorías, sino que ahora ocupan un
puesto en el Consejo de Estado. ¿Para aconsejar a quien?: será a su cartera que
es la única que engorda teniendo a un indigente intelectual opinando sobre un
Estado al que ha dejado en pura pelota.
Zapatero al no reconocer durante sus
últimos cuatro años de gobierno la existencia de una crisis galopante siguió
enriqueciendo a sus conmilitones y regalando el dinero de nuestros impuestos
necesario para evitar despidos y cierres de empresas hacia feministas, memorias
históricas y dictadores de la izquierda del mundo mundial. Ahora la cuestión no
es que los socialistas tengan que dar cuenta a los tribunales de sus fechorías,
sino que venga otro caradura y viendo la faena de aliño realizada por Zapatero,
pueda tener la tentación de seguir su
camino.
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