2018-10-15 Redacción.
España, un gran país, instalado en la mentira y en la injusticia. Policías y Guardias Civiles con el peso de la Seguridad pública, jugándose la vida en la calle a diario y mal pagos y engañados. Nuestra casta política arruinando el país y bien pagos y premiados. España un país sin remedio. Los asesinos de ETA en la calle y los Guardias Civiles democráticos por solicitar una asociación separados del servicio y perseguidos por la delictual Operación Columna; hasta cuando el pueblo va aguantar esta situación levantándose contra todos, nuevos, viejos y progresistas.
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Publicado un nuevo número del semáforo, claro como siempre, nos indica qué tipo de gobierno tenemos y el mantenimiento de las mentiras endémicas. España es un reducto donde la justicia y la democracia brilla por su ausencia. Donde los Derechos Humanos son un camelo y donde todos callaron para coger la bolsa y correr.
A estas alturas de la película todavía tenemos a los Guardias Civiles Democráticos esperando que se haga justicia, se cumplan las sentencias del TEDH, del TD y las resoluciones parlamentarias que sin fuerza de ley recomendó y como cámara ordenó la rehabilitación de los Guardias Civiles Democráticos en sus puestos.
Alguién en este país se puede creer que alguno nos salvó del golpe de estado. Existe alguien que se crea que sólo han robado unos pocos. Puede haber alguno que se crea que la casta política sirve a los intereses generales.
Para ejemplo veamos a nuestros políticos actuales, nuevos , viejos y jóvenes sólo les interesa la bolsa y el bolso
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